Qué … es esto?, es lo que supongo que se pregunta todo aquel que se aventura a ver esta película, sí aquellos que como yo, lo hacen sin saber absolutamente nada del argumento o de quién es el director durante los primeros veinte minutos te dan ganas de dejar de verla, en serio, pero justo en ese momento de abatimiento en el cuál estás a punto de sucumbir a la incertidumbre y al desconcierto aparece el señor Michael Parks o «The brick top» en «Snacth» para absorber tu atención como una especie de agujero negro interpretativo equilibrando la historia y dándole sentido, entonces la historia te atrapa y con una mezcla de rechazo y atracción inexplicable continúas viéndola hasta que estás totalmente dentro de ella.
Hay que añadir que entre los personajillos de la película hay un extraño detective canadiense interpretado por un siempre genial Johnny Depp y que descubres que el director es el legendario Kevin Smith y te das cuenta del porqué de las alusiones al hockey, a Nueva Jersey , a cierto tipo de diálogos y a un homenaje encubierto al Gran Lebowsky. En suma, una película no apta para estómagos sensibles que seguramente es de las que nacen póstumas, es decir, será incomprendida y vilipendiada por sus contemporáneos pero con el tiempo se convertirá en un clásico del género.
Bruxismo nocturno 