Pues sí, al final fui a ver esta peli. Como gran aficionado al género bélico y después de verla anunciada no pude resistir la tentación y la verdad no defraudó mis espectativas.
Durante la batalla de Okinawa, un soldado americano, Desmond Doss(Andrew Garfield) enrolado en la 77º division de infantería que hacía las veces de sanitario permaneció en el campo de batalla después de que toda su unidad se retirase y durante dias se dedicó a salvar a todos los compañeros heridos que pudo, en total 75,»señor, ayúdame a salvar a uno más» repetía sin cesar el protagonista con los handicaps de tener que bajarlos por un acantilado de 150 metros para alcanzar la seguridad del puesto de mando y por supuesto de su negativa a empuñar un arma debido a sus convicciones religiosas. Acto que le valió ganar la medalla de honor del congreso, sí esa que también le daban a Forrest Gump y a Johnny Rambo.
La batalla de Okinawa es una de las más sangrientas de la Segunda Guerra Mundial, duró tres meses y era conocida por los japoneses como «tetsu no ame» o lluvia de acero ya que de la guarnición de 100000 mil soldados japoneses que la defendían tan sólo sobrevivieron 7000 mil e influyó en la decisión de utilizar la bomba atómica sobre Japón para forzar su rendición además de producirse suicidios de civiles en masa. Al mismo tiempo no hay muchas películas centradas en ella, recuerdo un episodio de la serie The Pacific y poco más. También es famosa por ser la batalla en la que los kamikazes japoneses actuaron con más intensidad así como en la que se produjo el hundimiento del acorazado Yamato en una misión suicida conocida como opreación Ten-go.
El hecho de que el director fuese Mel Gibson hacía que no estuviera del todo convencido pero después del visionado encuentro esos prejuicios bastante infundados. En cuanto al reparto, el protagonista Andrew Garfield realiza una interpretación bastante creíble ayudado por su físico de «efebo ajado» y su aire de pánfilo bastante parecido al del personaje que interpreta pero destacan sobre todo y a mi modesto entender dos personajes secundarios, los interpretados por Vince Vaughn, un duro sargento que recuerda vagamente a la chaqueta metálica y el siempre imponente y capaz Hugo Weaving que interpreta al traumatizado y alcohólico padre del protagonista, veterano de las trincheras francesas en la Gran Guerra e incomprendido por sus semejantes. La película, en conjunto es irregular y de extremos ya que hay dos partes perfectamente diferenciadas, la primera en la que se nos presenta al protagonista, desde su infancia hasta el momento en el que se alista y realiza la instrucción junto con la circunstancias sociales y familiares que lo hacen actuar en base a unas determinadas convicciones y que resulta extremadamente empalagosa y chirriante sobre todo en el aspecto religioso-amoroso (llegó a recordarme a Pearl Harbor, horror!!!!!). La segunda parte es básicamente por lo que pagas la entrada, para ver la batalla y es ahí donde el señor Gibson y su equipo de efectos especiales despliegan todo su talento ofrecienedo una serie de secuencias de una crudeza y de una veracidad que harán que otras películas bélicas similares parezcan Disney aunque tampoco se libra de los ya tradicionales «sucesos increíbles» también conocidos como «fantasmadas» que pasas por alto pensando en que si está basado en hechos reales puede que sucediera algo parecido, «bigger than life» suele decirse. La escena de la carga «banzai» de los japoneses al casi imperceptible grito «Tenna heika banzai» (larga vida al emperador) es verdaderamente acojonante impresionante y perturbadora. Resulta especialmente emotivo ver ya al final de la película un fragmento de entrevista al ya anciano Desmond Doss, el protagonista de la película, relatando tal cuál lo cuenta algunos sucesos y situaciones que se recrean en la película así como el «seppuku» del comandante japonés Mitsuru Ushijima (1887-1945).
Si te gusta el género vete a verla porque no defrauda desde el conjunto, algunas partes en concreto puedan considerarse prescindiblemente necesarias y algo melifluas pero viéndola como un todo se trata de una muy buena película.
Absolutamente recomendable