
Simplemente, una de las mejores series que haya visto últimamente. Sorprende por la frescura de su planteamiento, esto es, una trama que mezcla la ciencia-ficción con los thrillers policíacos, con unos personajes extremadamente carismáticos; unas interpretaciones brillantes además de plantearnos una interesante reflexión.
El argumento consiste en que un buen día empiezan a aparecer por todo el mundo personas que vienen de otras épocas como si se tratara de inmigrantes ilegales sólo que en vez de llegar en endebles embarcaciones lo hacen por un agujero de gusano o túnel temporal y se centra en Noruega, concretamente en personas que llegan de tres épocas determinadas, la Edad de Piedra, el siglo XIX y la época vikinga. Los protagonistas son dos policías noruegos, él un drogadicto divorciado, inteligente y reflexivo y ella una vikinga que acaba de salir de la academia con modales vikingos que transmiten desde el principio una gran química, carisma y reflejan a la perfección el choque cultural entre las dos épocas, el caso es que su primer caso consiste en investigar el asesinato de una mujer de la Edad de piedra que aparentemente fue asesinada a las pocas horas de llegar al presente a partir de aquí y con la sucesión de capítulos las tramas de bifurcan, algunos personajes desaparecen y de una forma genial la trama principal se va diluyendo en una segunda trama que a su vez lo hace en otra sub-trama de forma que nada es lo que parece y lo que pensabas que era imposible en un principio se hace posible.
Otro de lo puntos fuertes son los personajes secundarios que complementan y potencian a la pareja protagonista y el final, a pesar de contar sólo con seis capítulos resulta ser en parte aceptable si continúan la serie en una segunda temporada ya que plantea gran cantiad de cuestiones nuevas que lo convierten en un muy abierto.
Te reirás y disfrutarás. Muy Muy recomendable